El Bonaerense habló con Sabrina Josie, jugadora de Chat Noir Roller Derby de La Plata, quien sobrevivió deportivamente a la pandemia y busca dar el impulso suficiente para el crecimiento de éste novedoso deporte.

El deporte es pasión de multitudes. A lo largo de mundo hay adeptos a todas las disciplinas que existan en éste planeta. Indudablemente, no sólo es una conexión con una vida saludable y atlética, sino un espacio para conectar con el divertimento. Un cable a tierra o una manera de reconectar con la parte lúdica de la vida. Por ello, cada práctica tiene una conexión espiritual muy particular entre quienes entrenan y compiten.

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Si bien muchos dicen que todo está inventado, en el deporte siempre hay un espacio para algo nuevo. En un contexto local donde el fútbol, básquet, tenis, handball, hockey, voley y natación son las disciplinas por excelencia, muchos otros deciden salir de lo común. En La Plata, Chat Noir Roller Derby es una sensación, ya que es la puerta para la expresión de muchas mujeres. Tomando un camino creado en el extranjero, iniciaron una carrera para la formación deportiva en nuestro país y, tras la pandemia, se mantienen vigentes.

Derby roller

Muchos creen que en los Juegos Olímpicos se pueden ver todos los deportes existentes, pero no es así. El derby roller es una clara demostración. "Un deporte en patines, de contacto, que se juega en una pista ovalada. Las jugadoras ingresan a la pista en períodos de dos minutos y la jugadora que lleva una estrella en su casco, que se denomina jammer , tiene que pasar a las blockers. Se hace como si fuera una carrera, donde deben empujar a las bloqueadoras para superarlas", inició a describirlo Sabrina Josie jugadora de Chat Noir Roller Derby.

No sólo trae la novedosa situación una competencia física en patines, sino que a la vista es interesante de ver. Está claro que quien lo aprecia por primera vez no termina comprendiéndolo, pero igual es atractivo. "Es un deporte que requiere mucha estrategia, fuerza, equipo y es bastante exigente. A la pista entran cinco jugadoras de cada equipo. Las cuatro bloqueadoras deben ayudar a pasar a su jammer , mientras niegan el avance de la otra", completa su relato.

Velocidad, intensidad, impacto y explosividad, todos condimentos que hacen de una disciplina muy entretenida. "Es muy visual y lindo de ver. No tiene pelota a diferencia de lo que estamos acostumbrados. La forma de sumar puntos es con los propios cuerpos", agregó Sabrina. Sin embargo, ganó adherentes muy determinados. En su gran mayoría son mujeres las que compiten y también hay transfeministas.

"La mayor cantidad de los equipos de derby son femeninos. También hay transfeministas, mixtos y masculinos, pero son los que menos hay", relató Sabrina. Claro, la ausencia de un organismo que regule el deporte a nivel nacional es un atentado a la proliferación, aunque el entusiasmo de las jugadoras lo mantiene vigente. "Es muy atractivo. Primero que es un deporte en patines y acá no hay muchos, no es algo practicado en la escuela o familiarizado. Como está constantemente cambiando las reglas y en crecimiento es muy atractivo".

Sin embargo, Sabrina reconoció que ellas son jugadoras, tesoreras, organizadoras de eventos y torneos. Claro, ese vínculo también las llevó a entablar un amor más profundo y sincero con el derby roller. "No hay federación, ni organización a nivel nacional. Todos los equipos son amateurs. No hay torneos oficiales. Acá cada equipo es su propio organizador de torneos. Las competencias son armadas en fin de semanas largos o en un día. Todo sale de los propios equipos".

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Si bien de chica practicaba deporte, la relación era totalmente diferente. Las habituales disciplinas de clubes ya tienen toda una organización detrás y el vínculo a veces no es tan profundo. De más grande comenzó a entrenar en el gimnasio, pero la individualidad la cansó. "Quería hacer algo en equipo y había pensado en handball. Pero conocí el roller derby por las redes sociales y, como siempre me gustó patinar, dije ésta es la mía. Desde 2016 estoy en Chat Noir Roller Derby", afirmó.

Chat Noir Roller Derby

Desde el club Estrella Sur en Los Hornos, consiguieron mantenerse vigentes a pesar de la dura realidad y el deceso de muchos otros planteles que tienen el mismo sueño. "Chat Noir Roller Derby se forma en 2013. Actualmente, en nuestro equipo somos 10 jugadoras y dos aspirantes. Son dos personas que integran el equipo y desean ser jugadoras. Al ser un deporte de contacto y en patines, lo primero que se tiene en cuenta es la seguridad. Hay ciertos requisitos: el reglamento, los bloqueos legales, habilidades básicas de patín y de derby".

Ellas pudieron mantenerse vigentes. Con ya casi 10 años como equipo, han superado etapas de muchos abandonos, de pandemia y, ahora, de un profundo convencimiento por la disciplina. Si bien en todo el conurbano empezaban a surgir equipos, relató que en la Ciudad de Buenos Aires había dos equipos con un tamaño superlativo. Además, estaban federados a nivel internacional, lo cual hacía que sean el mayor atractivo de las jugadoras. Por ello, a los equipos menores se les dificultaba.

"El resto de los equipos eran de 12 jugadoras remándola a pulmón. Entonces nos invitaban a jugar y a veces no podíamos porque no llegábamos con las jugadoras disponibles. Era una situación muy extraña porque había muchos equipos, pero pocos partidos. Costaba reclutar gente y que se mantengan", aseguró. Sin embargo, la pandemia y la cuarentena terminaron siendo un nuevo comienzo que promete.

"Después muchos equipos se disolvieron y dejaron de competir. La cuarentena los destruyó. Ahora, estamos en una nueva etapa. Los dos equipos grandes también iniciaron de cero. Pasaron de 70 personas a 15. Entonces estamos todos en la misma situación. Por lo tanto, los equipos que superaron la cuarentena y volvieron a entrenar estamos igualados. Estamos poniendo todo para que esto crezca. Se dejó de lado el show del derby y ahora hay más seriedad", relató.

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Si bien reconoce que sus amigos no comprenden el deporte, invita a más personas a ver y practicar el roller derby. Un deporte que busca su auge, detrás de la subjetividad de sus jugadoras. Principalmente femenino, pero con posibilidades para todos. Su intensidad, velocidad e impacto lo vuelven una posibilidad, pero hay que lucharla para poder seguir creciendo.