A Miqueas, de 11 meses, le agarró un repentino ataque de convulsión. "Salimos a pedir ayuda y el destino nos puso a un ángel en el camino", confesó la mamá del menor en dialogo con El Bonaerense.

En la vida pasa de todo. Desde momentos espléndidos para recordar eternamente a sucesos poco agradables cargados de desesperación y temor. Pero lo valiosos de las malas experiencias, sin duda alguna, son las personas que están presentes, quienes aportan un granito de arena para revertir los malos tragos.

Casi todo está ligado a la salud y el valor de la vida. Hay personas religiosas que creen que, cuando ocurre algo terrible, Dios envía a seres para ayudar en el momento, u otros que son fieles los pensamientos casuales y causales. En el caso de Miqueas, su mamá está volcada a la primera opción.

En efecto, Miqueas es un bebé de 11 meses de vida, de José C. Paz, quien tuvo un ataque de convulsiones durante la noche del 30 de julio. Frente a ello, su madre Julieta Aiixa salió a la calle a pedir ayuda, cuando, de repente, apareció un remisero, el ángel llamado Maximiliano Canelo, quien llevó a la mujer y al menor al hospital para su sanación.

Respecto a las desesperantes horas vividas, Julieta le contó a El Bonaerense: "Mi bebé se levanto sin ganas de comer, solo tomaba el pecho. Siendo las 19:00hs estaba jugando y de pronto se empezó a decaer, tenia moquitos y tos, le tomamos la temperatura le di ibuprofeno y lo bañé".

LEER MÁS Posse quiere “coronita” en el subsidio a la luz para no gastar en el Hospital de San Isidro

Luego de ello, la madre continuó: "Nos pusimos a cenar con mi familia y él se durmió con la temperatura de 36.6 y nos fuimos a acostar. Dándole el pecho empezó a temblar y los ojos se le fueron para atrás ( le agarró una convulsión), lo levante, gritaba y no reaccionaba. Salí corriendo a la pieza de mi hermana y se lo di, ella lo agarro y bajó corriendo las escaleras de mi casa, mientras yo gritaba por el balcón pidiendo ayuda" .

Julieta comentó que su mamá, abuela de Miqueas, salió de su domicilio porque escuchó sus gritos para pedirle ayuda al resto de los vecinos. "Mi mamá con mi bebé en brazos le hacia respiración boca a boca , cuando el destino nos puso a un ángel en el camino. Un auto que dobló justo y vio nuestra situación. Sin dudarlo subimos al vehículo. Era un remis con una pasajera".

LEER MÁS Corazón de oro: Abandonaron a una perra en una zanja porque estaba ciega y ella la rescató

"Mi mamá le seguía haciendo respiración boca a boca hasta que se quedo sin aire y empecé a hacerle yo. Mientras mi mamá rezaba, la pasajera sacaba la mano por la ventanilla y el hombre iba tocando bocina", contó Julieta y explicó que "cuatro cuadras antes de llegar al hospital mi bebé empezó a hacer un sonidito, y el hombre nos decía que ya estábamos llegando".

"Bajé del auto, entré corriendo al hospital del Niño y la Mujer de José C. Paz y una chica de administración lo agarro a mi bebé y lo metió en la guardia. Le pusieron oxigeno, le tomaron el pulso y una inyección y mi hijo empezó a llorar y a reaccionar", continuó la mujer paceña.

Gracias al remisero que se vistió de héroe, Julieta agregó: "Lo tuvieron internado en observación hasta el domingo a las 11:00hs. Cuando nos dieron el alta me contaron que el remisero se había acercado a mi casa a avisarle a mis hermanas que el bebé, antes de llegar al hospital, empezó a reaccionar".

LEER MÁS Un comedor de San Martín que alimenta a 130 personas pide colaboración

"Nos pudimos contactar con el hombre, a través de una publicación de Facebook y gracias a la gente que la compartió", remarcó la señora acerca la masiva difusión que tuvo su posteo dentro de los grupos vecinales de José C. Paz.

"Me gustaría agradecer a la pasajera del vehículo y darle millones de gracias a Maximiliano Canelo, el remisero, el ángel de mi hijo", cerró Julieta Aiixa.