Vecinos de Villa Alcira explotaron contra el Municipio porque una calle continúa sin asfaltar hace una década y aseguran que cuando llueve es muy complejo transitar por ahí. Piden a las autoridades que inicien la gestión para hacer la obra.

Los vecinos de Bernal se agruparon para expandir su reclamo ante la falta de respuestas del Municipio. Aseguran que si bien en 2011 se asfaltaron las calles de Villa Alcira, el suelo de Almafuerte sigue siendo de tierra en el tramo que va de Caseros hasta Carril Lauquen. De esta manera, tras diez de incontables quejas a la gestión local, volvieron a pedir obras para poder transitar adecuadamente por allí.

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La desidia, el hartazgo e incansables reclamos se expresan desde la voz de los vecinos que transitan cotidianamente la zona. Evidentemente, buscan explicaciones en los políticos sobre porqué no está asfaltado ese tramo, ya que el resto del barrio fue trabajado hace una década. Sin embargo, aseguran no tener una respuesta sincera de las autoridades competentes.

"¿Saben cuál es la razón? Esa calle, a diferencia de las otras asfaltadas en 2011, no da al Nuevo Quilmes, que pena", postuló Néstor animándose a conjeturar al respecto. Así, despertó el notable enojo de todos los ciudadanos que viven en la zona. "Siendo Almafuerte una calle casi céntrica, a 8 cuadras de la estación de Bernal, y de tierra demuestra bien clarito que no caminan por los barrios", sostuvieron los vecinos.

Por su parte, Daniel afirmó haber tenido contacto para entender la situación. "Todos se lavan las manos y la contestación es que estas cuadras que son diez, si no me equivoco, dicen que apareces 3 veces asfaltadas", postuló. De esta manera, los vecinos decidieron volver a organizarse para poder solucionar la falta de trabajo en la calle Almafuerte en la última década.

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No sólo afecta a quienes viven allí y cotidianamente deben transitar sobre la tierra, sino que a los docentes. En días de lluvia aseguraron que la zona es muy difícil de cruzar. Barro, agua y pozos hacen un caldo que irrita aún más a los locales."Por esa calle entraba a dar clases de fines y en invierno o días de lluvia era terrible pasar por ahí. Pensaba en mis alumnos y la gente que vive ahí. ¿Por qué tanta desidia?", expresó Claudia.