Matanceros apuntaron contra los jóvenes debido a presuntas amenazas, además, sostienen que aunque denuncian a la policía, “ellos mismos los cubren”. 

Los trapitos son aquellas personas que vemos generalmente en las calles con alguna pechera identificatoria, los mismos exigen dinero a cambio de cuidar el coche mientras el dueño no está presente. 

Se le dice popularmente  “trapito” ya que originalmente, llevaban un trapo en la mano. En este contexto, los jóvenes están en el ojo de la tormenta provocando la furia de los vecinos de Ramos Mejía ya que sostienen que reciben malos tratos y hasta amenazas por parte de ellos. 

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“Estoy cansada de los trapitos en Ramos”, comenzó su descargo una residente en el grupo vecinal Vecinos en Alerta, y continuó: “Yo estaciono siempre mi auto para buscar a mi hijo con discapacidad cuando sale del colegio o cuando lo llevo a terapia o hago algún trámite y este individuo me amenazó por que le dije que no le iba a dar plata”.

A su vez, adjuntó fotos del sujeto e inmediatamente usuarios de la red social comenzaron a comentar situaciones muy similares. “Eso es ilegal. Llamé al 911 pero ni aparecieron”. En esta línea, la zona en cuestión es alrededor de la estación del Tren Sarmiento de la mencionada localidad. 

“A mí me pasó algo parecido una vez y yo me fui, pero le pedí a un policía que me acompañara de vuelta porque tenía miedo que me hiciera algo o que me hubiera roto el coche, y vi que la policía le hablaba nada más”, dijo Graciela, conductora.  

Al respecto, Victor, vecino de La Matanza, informó que: “El estacionamiento en la calle es medido, de 08:00 a 20:00 horas, cuando pasa el zorro, si no pagaste, te hace la multa, no hay por qué pagar a los trapitos”.

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Además, otros ciudadanos recomendaron realizar la denuncia correspondiente pero aseveraron vecinos que ya la han realizado que “todo queda en la nada”.  “Ya tuve un problema con uno. ¡Me golpeó el auto por negarme a pagarle! Cuando lo veo estaciono en otro lado, prefiero pagar más y dejarlo en un estacionamiento que darle 2 pesos a esta gente”, cerró indignada Cyntia.