¿Coincidís con las quejas de los vecinos?
El lugar en cuestión es el popular nosocomio Dr. Alberto Balestrini.
Vecinos de La Matanza se manifestaron en redes sociales por la atención en el Hospital donde acuden muchos de los residentes de Ciudad Evita. Las opiniones se dividieron entre buenas y malas, sin embargo, todos coincidieron en un pilar: las interminables horas de espera.
“¿Alguien sabe qué tal es la guardia de adultos del Hospital Balestrini?”, consultó en un grupo vecinal Ailen, ciudadana matancera, ante esto, la publicación se llenó de comentarios con diversas experiencias pero la más destacada es el tiempo de espera para ser atendidos.
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“Es depende como te toque”, comenzó su relato una vecina, y continuó: “casi siempre esta llenísimo pero a mi, me atienden muy bien, aunque se de muchas personas que no les pasó lo mismo y tuvieron muy mala atención, por eso diría que es un azar”.

En esta línea, la mayoría de los usuarios manifestaron que “hay que tener paciencia”. “Mi tía fue con dolor de vesícula a las 11 de la mañana, esperó hasta las 17 hs y no la atendieron”, dijo Camila. En cambio, otros dijeron que en dos horas, salieron con al menos un diagnóstico de la enfermera.
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El Hospital Balestrini está ubicado sobre la Avenida Monseñor Bufano, al 177, ubicado en la localidad de Ciudad Evita, partido de La Matanza. En definitiva, quien desee atenderse en el sitio, podrá procurar una larga espera, “la última vez, había una demora de 10 horas, tenía 100 personas adelante”, cerró Gonzalo, vecino del distrito.
1 comentario
Mi papá falleció por culpa de que estuvo con dolor de pecho más de 6 horas un domingo desde las 14hs aproximadamente hasta las 22hs hasta que lo atendieron, según ellos que habían personas con más gravedad que él que tenía dolores de pre-infarto. Le dijo que vuelva al día siguiente a sacar turno con el cardiologo y lo mando a su casa y falleció. Esa fue su última noche, nos trataron muy mal, cada vez que me quejaba que le dolía el pecho a mi papá me decían tenes que esperar, como si no fuera nada. Se murió esperando que lo atiendan.