Prisión preventiva para uno de los asesinos de Kim Gómez

BONA DATA

• La justicia dictó prisión preventiva por 180 días para el menor de 17 años acusado del crimen de Kim Gómez.
• El menor de 14 años, detenido en el caso, permanecerá con medidas de seguridad hasta una nueva audiencia.
• Los padres de Kim Gómez, Marcos y Florencia, estuvieron presentes en la audiencia y exigieron justicia.
• El padre de Kim, Marcos, se enfrentó cara a cara con el acusado de 17 años, pero prefirió no detallar el encuentro.
• Florencia, madre de la víctima, expresó su dolor y pidió cambios en la ley para evitar futuros crímenes.

La decisión judicial y el futuro de los detenidos

La jueza Carmen Ibarra, a cargo de la UFI número tres de Menores de La Plata, dictó la prisión preventiva para el joven de 17 años acusado de ser uno de los responsables del crimen de Kim Gómez. El fallo establece que el detenido permanecerá bajo custodia durante 180 días mientras se lleva adelante la investigación.

Por otro lado, el menor de 14 años, quien también fue detenido en relación con el crimen, declaró en su defensa y ubicó el lugar del hecho, pero aseguró que no participó directamente en el delito. La jueza determinó que, mientras se aguarda una nueva audiencia en una semana para evaluar pruebas adicionales, el menor permanecerá bajo medidas de seguridad.

La marcha por justicia y el encuentro con los acusados

Este viernes, una nueva marcha fue organizada en La Plata por los familiares y vecinos de Kim Gómez, quienes siguen pidiendo justicia por la muerte de la joven. Los padres de la víctima, Florencia y Marcos, estuvieron presentes en la audiencia y expresaron su dolor públicamente.

«Fue difícil, pero estuvimos. Florencia se la bancó y pudo ver a los asesinos. Al chico de 17 años le dije cosas y ahora me siento mejor», contó Marcos, el padre de Kim, quien compartió su experiencia al enfrentar al acusado. Aunque evitó dar detalles sobre el encuentro, destacó que fue una experiencia «fea, mala y hasta buena».

Por su parte, Florencia rompió en llanto al referirse al caso de su hija, quien fue asesinada tras un robo. «Kim no es la primera, pero quiero que sea la última», dijo. Además, recordó cómo presenció el violento robo y el arrastre de su hija durante 15 cuadras, un trauma que la acompaña constantemente.

Ambos padres coincidieron en la necesidad de implementar cambios profundos en el sistema judicial para evitar que hechos como este se repitan.