En la tercera audiencia del juicio contra Marcelo Macarrón, viudo de Nora Dalmasso, los hijos del matrionio cordobés, Facundo y Valentina Macarrón apuntaron contra Miguel Rohrer. Se trata de un “amigo de la familia” conocido como “El Ruso de Adrogué”, según su perfil de Facebook.

Quince años pasaron del crimen de Nora Dalmasso, quien fue ahorcada en su casa de Rio Cuarto, y hace tres días comenzó el juicio que tiene a Marcelo Macarrón, el viudo, como principal acusado. Sin embargo, los hijos de la difunta apuntaron contra Miguel Rohrer, un empresario oriundo de Adrogué, partido de Almirante Brown.

En la tercera audiencia del juicio contra su padre como principal acusado del asesinato de su madre, Facundo y Valentina Macarrón declararon y, directamente, apuntaron contra Miguel Rohrer, a quien consideran como “sospechoso” del crimen. Se trata de un “amigo de la familia” conocido como “El Ruso de Adrogué”, según se hacía llamar en su perfil de Facebook.

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Rohrer, oriundo de Almirante Brown y empresario de actividades agropecuarias, ya había sido investigado en la causa y sometido a un examen de ADN, el cual determino que no se encontraron sus rastros en la escena del crimen. “No era su amante ni la maté”, declaró a Infobae el acusado por Marcelo Macarrón.

Por ello, el fiscal lo apartó de la causa, ya que no tenía las pruebas suficientes para involucrarlo. Sin embargo, existen ciertas contradicciones en las declaraciones en todos estos años. Aseguró tener una relación de amistad con Macarrón y, posteriormente, definió que su contacto con Dalmasso no era fluido. “Éramos conocidos. La veía dos veces por año”, comentó al referirse a un vínculo como padres del mismo colegio.

No obstante, los hijos de la víctima relataron momentos de esparcimiento en el campo entre toda su familia y Rohrer. Allí, Valentina sostuvo que tenía actitudes de “acoso, la miraba mucho” y su hermano habló de una posible relación entre su madre y el empresario de Adrogué.

Actualmente, Rohrer se encuentra asentado en Córdoba donde se desarrolla en actividades de la industria agropecuaria en la zona de Rio Cuarto. Cuando ocurrió el crimen algunos se animaron a mencionar que él estaba en la Docta, aunque el apuntado afirmó: “Yo vivía desde 1999 en Buenos Aires, es una mentira que me fui de Río Cuarto luego del lamentable hecho”.