La oportunidad le llegó a los 34 años y siendo vital para el grupo. Sus comienzos en Sarandí, la idolatría en Italia y su dura infancia, a continuación.

El comienzo de la vigésima segunda copa del mundo está a la vuelta de la esquina. El debut de la Selección Argentina será el 22 de noviembre ante Arabia Saudita, desde las 07 horas. Igualmente y para calmar las ansias, este miércoles los de Lionel Scaloni jugarán un amistoso ante Emiratos Árabes, seleccionado que dirige Rodolfo "Vasco" Arruabarrena.

Para ese duelo, el entrenador argentino dispondrá de sus 26 seleccionados, que terminaron de arribar a Medio Oriente el pasado lunes. Entre ellos está Alejandro "Papu" Gómez, quien tiene altísimas chances de ser titular tanto mañana como en el debut mundialista, debido a la baja de Giovanni Lo Celso.

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El mediocampista de 34 años juega en el Sevilla de España, aunque no le fue para nada fácil llegar a la elite de Europa. Empezó en el baby fútbol de Racing Club, mientras en aquel entonces idolatraba a un hijo pródigo de La Academia, Claudio López, más conocido como el "Piojo". Incluso, le gustaba utilizar su número 7 en las prendas.

Luego de su estadía en el club de Avellaneda, se fue a probar suerte en Arsenal de Sarandí, en donde se hizo notar rápidamente gracias a su capacidad nata para jugar a la pelota. Remate, pegada fuerte y visión de juego ya lo destacaban desde muy chiquito.

Su primer gran logro, además de haber debutado en Primera División, fue en ser campeón del mundo con la selección Sub 20, que fue organizado en Canadá. Compartió equipo con Sergio Agüero, Mauro Zárate y Ángel Di María entre otros, en donde jugó varios partidos.

Las buenas siguieron para él luego de la cita mundialista, ya que obtuvo con el equipo fundado por Julio Grondona el primer título internacional a nivel clubes de su carrera, la Copa Sudamericana, en la que fue una de las grandes figuras y tachó del camino a grandes como River y San Lorenzo.

Gran paso a San Lorenzo y vuelo a Europa

Debido a sus grandes actuaciones, logró dar un santo en su carrera y jugar en El Ciclón de Boedo. Fue dirigido por el "Cholo" Simeone, con quien luego se reencontraría en el Catania de Italia, su primer club europeo. Allí jugó varios años, y tras un breve paso en la liga de Ucrania, volvió a la Serie A, en donde fue la figura rutilante del Atalanta.

Allí se ganó la chance de jugar en la selección mayor y ser tenido en cuenta por Jorge Sampaoli, quien lo citó para jugar las eliminatorias, pero finalmente no lo llevó a Rusia 2018. En el medio, pasó al Sevilla español y volvió a ser considerado. Desde la llegada de Lionel Scaloni fue siempre una fija y lo convocó siempre. Ya salió campeón dos veces con la Albiceleste y va por el sueño de su vida: La Copa del Mundo, en Qatar.

El camino del Papu es el que cualquier chico del conurbano quisiera cumplir, sea de Sarandí, Avellaneda u otro lugar. Muchos se identifican con sus comienzos humildes, tener siempre los mismos amigos o conservar la misma novia desde que iba al secundario. Es uno más, quien nunca bajó los brazos y va por más.