Ciudadanos de distintos barrios del partido se manifestaron en redes sociales por la cantidad de roedores que hay en las calles del barrio.

Las ratas representan un riesgo para la salud de las personas ya que transmiten diferentes infecciones o enfermedades. El motivo de contagio es solo por la mordedura de un animal infectado. Sin embargo, los vecinos se quejan por los basurales donde habitan estas pequeñas.

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“Quisiera saber si por sus barrios, andan paseando lauchas… Es impresionante  las que hay...!!!” comenzó el debate Monica, quien vive en San Alberto. Inmediatamente muchas personas se sumaron  a la publicación y comenzarona  contra sus experiencias y hasta le dieron consejos. 

Patricia, vecina de la zona, confesó que “teníamos el mismo problema” y  recomendó “Obligar a los vecinos que no sean mugrientos y tiren todo a la calle! pero lo más importante es SACAR TODAS LAS PARRAS PORQUE SE ALIMENTAN CON ESO”.

Y continuó: “Yo le digo a cada vecino que embolse su basura”. En esta línea, Emilie agregó que sobre las calles Almagro y Pringles también padecen la misma problemática. Por su parte, Ana dijo que “entre la Piedad y los Mayas, estamos minados por ratas”.

Los vecinos afirman que muchos de los roedores viven en las bocas de tormenta y que salen para buscar comida. “No puedo explicarte lo que luché con eso. En la manzana que vivo tengo un vecino acumulador, se ocupó el municipio de entregarnos cebo pero no se solucionó aún tres años llevo con eso. Es inhumano”, confesó Patricia. 

Hasta el momento, los vecinos continúan en la lucha, ya que ponen cebo y trampas pero las ratas persisten. Al respecto, según Juan, vecino de Ituzaingó, cerraron un geriátrico ubicado en Laprida al 1400 ya que “explotaba de ratas”.

Por otro lado, Graciela, quien vive sobre la calle Mansilla, a cuatro cuadras de la plaza, recomendó: “Los vecinos llamamos al Municipio por ese tema. Vinieron a traernos cebo y dar indicaciones de cómo utilizarlo. Se empieza por limpieza dentro de las casas, luego se colocan los cebos. Para que dé resultado lo tienen que hacer todos los vecinos”.

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"Pero así y todo al vivir cerca de las vías del tren y de edificios en obra y terrenos abandonados es imposible que no haya ratas. Los animales no tienen la culpa de esta invasión, somos nosotros , como comunidad que tenemos que ser higiénicas y exigirle a los "responsables " que hagan lo que les corresponde”, cerró la ciudadana.