Esta madrugada ocurrió algo increíble en Ituzaingó. La comisaría de Villa Ariza fue alertada por un llamado de los vecinos al 911, según el cual había un sospechoso que intentaba entrar en una casa del barrio.

Un patrullero asistió a la escena y observó que una persona saltó dentro de una propiedad ajena mientras intentaba fugarse. Evidentemente, los delincuentes habían escuchado el sonido de las sirenas policiales.

Pocas cuadras más adelante, estos hombres fueron detenidos en su punto de encuentro: un Renault Sandero color gris. Los delincuentes fueron arrestados y llevados a la comisaría de Ituzaingó, pero algo iba a salir mal.

Como los efectivos policiales de este barrio de Ituzaingó no consiguieron pruebas instantáneas de que estos hombres habían robado, a pesar de que los habían visto huir, la fiscalía ordenó, en mitad de la noche, que estos hombres debían de ser liberados. Desde diversos medios locales, apuntan por esta actitud a Julio Conte Grand.