Familiares y amigos de la víctima conmemoraron al joven a través de una concentración en la sucursal donde ocurrió el hecho. El autor del crimen sigue prófugo y ofrecen una recompensa de $5 millones.

El crimen de Mario Germán Chávez Torrez tuvo lugar el pasado 31 de enero del 2020, luego de un asalto al Banco Nación de Isidro Casanova, ubicado en la intersección de  Rinaldo y Trinidad, Allí los padres de la víctima de 31 años, encabezaron un emotivo homenaje en la puerta de la sede bancaria; donde también estuvieron presentes sus compañeros de trabajo, representantes sindicales del gremio “La Bancaria” e inclusive funcionario del Banco Central de la República Argentina.

En dicha conmemoración también se alzó un pedido de justicia para esclarecer el crimen de German, para que este no quede impune. Por otro lado, estuvieron presentes algunos de los trabajadores del Banco Nación de Isidro Casanova que estuvieron presentes el día de la tragedia y que continúan sin regresar a la sucursal, tras lo ocurrido.

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Además, se espera el juicio contra los integrantes de la banda detenida, el mismo tiene fecha para el próximo 2 de junio y se llevará a cabo en el Tribunal Oral Criminal Federal N° 3 de San Martín. Sin embargo, aún falta dar con el prófugo más buscado de la Argentina: Alberto Manuel Freijo, de 39 años, por quien se ofrecen 5 millones de pesos de recompensa para el que aporte datos.

No obstante, cabe recordar que el crimen tuvo lugar el pasado 31 de enero del 2020 a la mañana, a pocas horas de abrir la sucursal. En ese momento ingresaron al menos tres delincuentes, alguno de ellos con el rostro cubierto con una media de mujer, que portaban armas largas y pistolas y amenazaron a los empleados del mostrador de atención al público. En ese momento, los delincuentes se dirigieron a las cajas y exigieron el dinero.

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Allí, delincuente conocido bajo el alias “Aceite”, asesinó a sangre fría a Mario Germán Chávez, luego de que este se abalanzó sobre Norberto (Luter) Salinas, uno de los participantes en el robo.  La secuencia se dio, luego de que los delincuentes empezaron a llevarse el dinero, en un nerviosismo de Salinas, se les cayeron varios fajos de dinero que al intentar recogerlos, Chavez aprovechó para reducirlos; dicha acción le costó la vida.

En ese momento, Freijo intervino con rapidez y disparó dos veces, la primera bala impactó en una rodilla de su cómplice, la segunda dio de lleno en el abdomen del cajero. Freijo cargó a Chávez hasta la salida y desde allí los ladrones se dieron la fuga en un Renault Fluence,  el cual estaba estacionado afuera. Posteriormente del interior de la sucursal salió un efectivo de la Policía Federal, vestido de civil, quien dio la voz de alto. Le respondieron a los tiros y huyeron con un magro botín de apenas 190.000 pesos, guardados en una bolsa de basura.