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La Scaloneta se fue ganando al descanso con gol de Messi pero Arabia, en 10′ del ST, lo dio vuelta y se quedó con el partido.
La Selección Argentina perdió 2-1 con Arabia Saudita en su primer partido en el Mundial de Qatar, al que arribó como uno de los favoritos por su condición de campeón de América y la vigencia del invicto más extenso de su historia (que terminó allí).
Con gol de Lionel Messi de penal a los 10′, el seleccionado de Lionel Scaloni había comenzado ganando y generando muchas situaciones de gol (algunas con gol incluido, anulados por offside).
En el segundo tiempo, Arabia Saudita arrancó encendido y en menos de 10 minutos ya lo ganaba 2-1 con goles de Saleh Al-Shehri y Salem Al Dawsari, en las únicas llegadas que tuvo el equipo. La sorpresa, claro, fue grande y enmudeció a los argentinos presentes en el estadio.
La Argentina intentó empatar el partido pero, a pesar de las llegadas, no tuvo suerte ni el buen juego que la caracteriza y Arabia dio el primer gran golpe de Qatar 2022.
Minuto a minuto:
- 10′ Tras penal a Leandro Paredes, Lionel Messi convirtió el 1-0.
- 30′ gol anulado por VAR a Lautaro Martínez.
- 45+5′ final del primer tiempo.
- 48′ gol de Arabia Saudita, Saleh Al-Shehri.
- 54′ gol de Arabia Saudita, Salem Al Dawsari.
- 90+13 final del partido.
El estadio de Lusail, sede de la final del próximo 18 de diciembre, recibió 80.000 personas para el estreno del equipo capitaneado por Lionel Messi en el Grupo C, que comenzó las 7 (13 hora local) con el arbitraje del esloveno Slavko Vincic y transmisión de la TV Pública, TyC Sports y DTVSports.
Argentina enfrentó a los saudíes por primera vez en la historia de la Copa del Mundo de la FIFA y no pudo igualar el récord invicto de un seleccionado nacional en toda la historia del fútbol, que le pertenece a Italia (2018-2021) bajo la conducción de Roberto Mancini.
La Scaloneta, vencedora del equipo italiano en la Finalissima de junio pasado en Londres, había caído por última vez ante Brasil el 2 de julio de 2019 por la Copa América y desde entonces encadenó 25 triunfos y 11 empates que le permitieron atrapar dos títulos luego de una sequía de 28 años.
