El ex Tigre dio sus primeras palabras tras bajar del avión en Ezeiza. Su vida fue una odisea esta última semana.

Ni gambetear rivales, ni correr por una pelota que se está perdiendo en la línea de fondo, ni jugar un encuentro definitorio. Nada de eso. El desafío más importante de la vida de Claudio Paul Spinelli fue salir de Ucrania para escapar de la guerra de este país con Rusia.

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Sin pensarlo dos veces, el ex Tigre aseguró: “Cuando pasé la frontera de Polonia no lo podía creer. Le contaba a mi papá que este fue el desafío más grande de mi vida”.

El delantero que estaba militando en el FK Oleksandria se mostró muy feliz por regresar sano y salvo a la Argentina. “Tengo suerte de estar acá, mucha gente no lo pudo hacer y no lo va a poder hacer”, expresó en TyC Sports. Y agregó: “Hoy quiero ver a mi familia, abrazarla y descansar. Ya mañana veré cómo sigue mi carrera”.

Lo que tiene claro Spinelli es que seguirá jugando. “Después de este desafío tan grande que viví, si no aprendo y bajo los brazos, no sería agradecido con la vida. Estoy muy bien preparado para lo que viene”, reflexionó.

Cabe destacar que el futbolista de 25 años vivió una odisea que duró dos días para poder escapar. Lo hizo con lo que llevaba puesto, con interminables viajes por la ruta y con caminatas en temperaturas bajo cero. En muchos tramos, hasta veía pasar tanques de guerra por al lado suyo.