Matías Méndez, presidente de la sociedad de fomento Fortunato de la Plaza, reclamó la cesión de terrenos para la construcción de viviendas.

El presidente de la asociación de fomento del barrio Fortunato de la Plaza, Matías Méndez, se encadenó ayer en la banca 25 del Concejo Deliberante de General Pueyrredón y la sesión debió ser interrumpida por más de una hora. El reclamo de Méndez se basó en la cesión de tierras que estaban destinadas a educación para construir viviendas en su barrio a través del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), liderado a nivel nacional por Juan Grabois.

El fomentista expuso que “se cedieron mal los terrenos” y responsabilizó la la presidenta del Consejo Escolar, Natalia Russo.  “Ella tendría que estar acá dando explicaciones”. Argumentó también, que “nos encontramos discutiendo entre vecinos por la cesión de tierras que eran para educación. Me indigna como vecinalista y referente barrial que esté pasando esto con la educación”.

Tras su discurso Méndez, sorpresivamente se encadenó y exigió respuestas. Esto motivó a que la presidenta del Concejo, Marina Sánchez Herrero, llamase a un cuarto intermedio. Tras una hora y media, el vecinalista se retiró y la sesión pudo continuar.

Las tierras están ubicadas entre las calles Fortunato de la Plaza, Soler, Camusso y República de Cuba, cuyas seis manzanas fueron donadas por la familia Peralta Ramos en 1935 para la construcción de establecimientos educativos en la ciudad de Mar del Plata.