Encontraron su cuerpo en la vivienda donde residía. Se había marchado del país en el mes de abril.

Una joven argentina de 30 años fue encontrada muerta en los últimos días en la localidad brasileña de Pipa, donde estaba radicada desde hace casi un año. El cuerpo fue hallado en su vivienda, acostada en su cama y con sangre en la boca. Por su parte, las autoridades policiales de Brasil están investigando si se trató de una intoxicación o de un asesinato.

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La víctima, identificada como Iara Nerea Reynoso, tenía 30 años y había nacido en Quequén. Luego vivió en Mar del Plata, donde daba clases de polo, su gran pasión. El 22 de febrero de este año, Iara había efectuado una denuncia en la Comisaría de la Mujer de Mar del Plata, en la que acusaba a sus padres de maltrato, violencia sexual y de abuso sexual por parte de su abuelo cuando era niña.

A raíz de este tormentoso pasado, había tomado la decisión de radicarse en Brasil, con el objetivo de arrancar una nueva vida y sanar sus heridas. Desde el mes de abril vivía en la localidad turística de Pipa, en el estado Río Grande do Norte. Fue allí donde encontraron su cuerpo el pasado viernes en "circunstancias confusas".

Fuentes oficiales informaron que sus padres y sus dos hermanos viajaron al Estado de Rio Grande do Norte y el cónsul en Recife, Alejandro Funes Lastra, les brindaba asistencia. La policía brasileña investiga si su muerte fue por una intoxicación o por un crimen. También está siendo investigado un hombre que la acompañó a una fiesta en un barco la misma noche del fatal desenlace.