A sus 69 años, el Kaiser sólo puede salir a las cercanías de su casa de San Isidro debido a un duro deterioro neurocognitivo.

Daniel Passarella está atravesando un duro momento de salud que lo alejó del mundo del fútbol y le cambió la vida. El ex bicampeón del mundo con la Selección Argentina casi no sale de su casa del barrio Lomas de San Isidro debido a dos terribles enfermedades neurodegenerativas.

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El ex jugador de River entre 1974 y 1981 está padeciendo las secuelas de dos enfermedades neurodegenerativas: el mal de Parkinson y el Alzheimer. Es un proceso de deterioro cognitivo similar al que vivió su papá.

El entorno íntimo del Kaiser asegura que sale muy poco de su casa y que cada vez son más recurrentes sus pérdidas de noción de tiempo y espacio. “Ya no es más el Passarella que conocimos. Ahora es otro Daniel”, le dijo un amigo del exfutbolista a Diario Olé.

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Según le dijeron a ese medio, las únicas actividades que realiza en la actualidad son algunos paseos en su Mercedes Benz por las cercanías de la casa de Lomas de San Isidro pero con asistencia.

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Así, el extécnico del Millonario en tres oportunidades y presidente entre 2009 y 2013 (descenso de por medio que generó condena social) se alejó definitivamente del mundo del fútbol. Si bien se había rumoreado su llegada a diversos clubes chicos, nada de eso será posible. ¡Fuerza, Kaiser!