Azucena hace tatuajes de agua para nenes y quiso instalar un puesto en la plaza Roca de Villa Ballester, pero “tres violentos” no la dejaron, según contó. ¿El municipio? Sin respuestas y con contradicciones.

Una mujer denunció un terrible hecho de violencia en el partido de San Martín. Azucena quiso trabajar haciendo tatuajes de agua y maquillajes a niños en la Plaza Roca de Villa Ballester y aseguró que fue amenazada y atacada por una familia de vendedores. Asimismo, sostuvo que fueron defendidos por la policía, y el municipio dio insólitas respuestas.

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“Yo trabajo en cumpleaños para nenas y se me ocurrió ir el domingo a la plaza a hacer tatuajes al agua y maquillaje”, comenzó contando en diálogo con El Bonaerense. “Puse mis cosas en un banco y vino una señora enloquecida, diciendo que me tenía que ir, que me iba a traer la policía y a gente de la villa Carcova a atacarme”, aseguró.

La mujer, según contó Azucena, trabaja junto a su marido y a su hija, quienes tienen otros puestos en esa plaza y quienes también la amenazaron. “Él me dijo que me iba a patear todo, que estaban hace 40 años ahí y que tenían derecho de estar ahí”, sostuvo.

“Y es cierto, esta gente me terminó mandando a la policía, que me dijo que necesitaba un permiso y me sacó sólo a mí, a ellos no”, agregó con desesperanza.

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Asimismo, expresó: “Lo que da bronca es que ninguno de los violentos me mostró permisos y nadie se los pidió. Si yo no puedo estar, ¿por qué ellos sí? No lo entiendo, da mucha impotencia”.

Siguiendo lo que le dijo la policía, la mujer se acercó al palacio municipal de San Martín, donde recibió insólitas respuestas y contradicciones. Por un lado, le dijeron que “no hace falta permiso para estar en la plaza”. Sin embargo, minutos después, al hablar con otros trabajadores, le dijeron que el intendente Fernando Moreira no le daría permiso.

“Primero, en Control Urbano, me dijeron que no hacía falta permiso y después, desde el mismo lugar, dijeron que le haga una carta al intendente. Se la hice y me aseguraron que me diría que no. Yo soy una persona grande y no entiendo, pero es algo que da bronca”, expresó con indignación.

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Asimismo, Azucena hizo la denuncia en la fiscalía luego de hablar con otro vendedor que también habría sufrido el ataque de los tres presuntos violentos. “Hice la denuncia en la fiscalía y un hombre me contactó por Facebook y me dijo que lo amenazaron de muerte y que debió irse de la plaza”, revelo.

Además, agregó: “Me dijeron que me iban a mandar gente de la Carcova, con la denuncia me quiero asegurar protección, fue una amenaza de muerte, tengo miedo, quiero que alguien haga algo, alguien del municipio”.

“Hoy en día todos necesitamos trabajar y yo no puedo por las amenazas de esta gente. Trabajan con chicos y son agresores y violentos”, sostuvo con indignación. Y finalizó: “No quiero que le pase a nadie más y quiero estar protegida”.