No están juntos y reciben comida de sus madres. Lloran y suplican por libertad. Además, aseguran que son inocentes.

Tras el aberrante hecho con muchísimas pruebas que los condenan, salió a la luz cómo viven los violadores de Palermo. Los seis hombres (cuatro de zona norte) que abusaron sexualmente de una joven dentro de un auto, están en celdas separadas y hasta lloran suplicando libertad.

LEER MÁS: Carta abierta de la víctima de la violación en Palermo

Ignacio Retondo, Ángel Ramos, Steven Cuzzoni, Lautaro Ciongo, Thomas Domínguez y Franco Lykan continúan encerrados y coinciden en una sola cosa: todos ellos aseguran que son inocentes, como suelen hacer la mayoría de los presos..

Por otro lado, algunos lloran desconsoladamente día y noche, mientras que otros prefieren el silencio y algunos se refugian en los libros o en las comidas que les llevan sus familiares.

Por lo pronto, el martes 15 de marzo se vence el plazo de diez días que tiene el juez Marcos Fernández para determinar si les dicta la prisión preventiva. Y si bien sueñan con salir en libertad, no toman dimensión de la condena social que ya se les hizo.

Fuente: Infobae.