El vehículo de la línea 57 sufrió el intento de robo en Camino del Buen Ayre.

La violencia y delincuencia en el transporte público está desatada y los choferes de colectivos son el blanco principal para los ladrones quienes golpean diariamente contra los trabajadores dentro del conurbano bonaerense.

Parece ser que el homicidio de Daniel Barrientos y las agresiones que recibió el ministro de seguridad de la provincia Sergio Berni no bastaron para que realmente se implementen medidas de seguridad, tanto para los choferes como para los pasajeros, ya que se trata del segundo ataque luego del crimen en Virrey del Pino.

En Morón, otro colectivero sufrió el robo a mano armada durante la madrugada del pasado 6 de abril. pero en esta ocasión, un piloto que circulaba por la zona norte de la provincia de Buenos Aires fue la víctima de un intento de robo.

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Justamente, durante la madrugada de hoy, un interno de la línea 57 fue atacado a piedrazos cuando realizaba su recorrido por el Camino del Buen Ayre y Debenedetti.

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El hecho de violencia e inseguridad ocurrió con fines de un nuevo asalto, pero el colectivero no frenó el vehículo y, pese a haber recibido los piedrazos, siguió con su recorrido.

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Todo sucedió a las dos de la madrugada. El colectivo pertenece a la empresa Atlántica y el chofer viajaba junto con su compañero hacia la terminal de ómnibus para arrancar a trabajar.

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Al llegar a la autopista, el interno recibió varios piedrazos en las ventanas, una quedó destruida. Ambos colectiveros registraron todo con sus celulares.