08/03/2023

Exclusivo

Martín Favelis, artista geselino: "Hacer humor gráfico y conocer a Quino fue un ciclo y sueño cumplido"


Ganó un concurso nacional y trabajó 10 años en Europa de manera profesional. Hoy trabaja como abogado y brinda conciertos de piano.





Martín Favelis puede definirse como un artista multifacético: hizo una importante carrera en Europa mediante el humor gráfico y, al volver a la Argentina, retomó su pasión por la música, más concretamente con el piano. Tras descubrir su talento para el dibujo, se postuló a un concurso nacional y logró desarrollarse profesionalmente. En diálogo con El Bonaerense, Martín repasó su experiencia en el viejo continente y el gusto por expresarse mediante el humor.





LEER MÁS: Nazareno Ramírez, deportista balcarceño que competirá en los Juegos Mundiales de Trasplantados





"Estaba en Argentina a fines de los 90 trabajando como administrativo en la universidad y empecé a hacer unos dibujitos por placer", comienza relatando. Y agrega: "Empezaron a gustarle a todo el mundo por el humor y la estética y me mandaron las bases de un concurso nacional de humor gráfico lanzado por la Secretaría de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires junto con Clarín y el Subte de Buenos Aires". Ese concurso marcaría un antes y un después en su vida. Su trabajo fue elegido entre más de 4000 presentaciones y se consagró campeón nacional. "El premio consistía en dos pasajes para ir a Barcelona, al Salón Internacional del Cómic", detalla.





Con otra de sus pasiones, el piano.




Ya en España, Martín decidió radicarse y a dibujar de manera profesional. "Era la primera vez que trabajaba como humorista gráfico profesional, fue rápido y sorpresivo". Y reconoce que la influencia de Quino en el mundo de habla hispana le ayudó a que se abrieran puertas. "Edité un libro y publiqué en revistas y periódicos de allá", rememora. Durante los 10 años que trabajó allí, residió en Barcelona, Tarragona y Granada. Luego, hubo dos factores que propiciaron su vuelta a Villa Gesell: el nacimiento de su hija en 2005 y, años después, la crisis económica que azotó Europa. "Yo tenía todo, menos los abuelos para ella. Y los periódicos donde trabajaba comenzaron a cerrar. Por suerte no estaba endeudado y pegamos la vuelta en 2012. Mi hija estaba cerca de su familia y yo cambié de aire", explica.









De vuelta en Sudamérica, Martín encontró que el trabajo artístico en el país se complicaba para vivir plenamente, por lo que decidió estudiar y en dos años se recibió de abogado, profesión que ejerce en la actualidad. "Recuerdo que hablé con Clarín porque mi carrera en Europa fue por el premio, entonces me imaginé que si me habían considerado el mejor humorista, me pareció que les podia interesar. Fue raro, tampoco insistí mucho. Pero algunas personas conocidas me dieron a entender que era complicado", pone en contexto.





LEER MÁS: El arte de fabricar instrumentos musicales contado por Nico Moreno, luthier costero





Su lado artístico se plasmó a través del piano, actividad que también practicó durante su estadía en España. "Lo retomé más a mi gusto, como conciertos para grupos reducidos, con mejores instrumentos. Una cosa más íntima y experimiental". Como él lo define, son "desconciertos" de piano, donde improvisa y hace alguna que otra humorada. "Busqué el mejor piano de la costa, en el living de una casa en Pinamar y hago algunas presentaciones", señala. Aun así, pudo hacer algunas colaboraciones a pedido para Amnistía Internacional, la Fundación Ana Frank, el Centro Europeo de Mujeres y Cruz Roja Internacional.









Otro de los sueños que pudo cumplir gracias al humor gráfico, fue conocer a su gran ídolo y referente, Quino. "Con él aprendí a leer. Antes de empezar la escuela leía las historietas de Mafalda de mis hermanos mayores", recuerda. También cuenta una anécdota: "Me acuerdo de haber estado en España y que me convocaban para hablar del humor gráfico argentino, y la verdad desconocía mucho del tema", aunque destaca que también aprendió mucho a medida que fue conociendo colegas. Y en cuanto a Quino, logró conocerlo en un encuentro en Madrid. "Me firmó un libro y charlamos. Tuvimos poco contacto porque ya estaba mayor, pero de chico haber soñado con sus viñetas y después conocerlo fue un ciclo y un sueño cumplido", cierra.


COMPARTE TU OPINION | DEJANOS UN COMENTARIO

Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.

Sociedad

18 de abril de 2024

Sociedad

En los últimos 120 días: Cayó el consumo de pan un 45%

"Esto no pasó ni en el 2001, es la primera vez en la historia", destacó Martín Pinto.

Medio Ambiente

Subscribite para recibir todas nuestras novedades

  © 2024 Helix Producciones S.R.L. | El Bonaerense | Av. Belgrano 863, 4 Piso A, C.A.B.A.