Escritora y poetisa marplatense, supo hacer una gran carrera con las letras. Recibió varias distinciones y su hija ya publicó un cuento.

Apasionada por el mundo literario, Evangelina Aguilera es una destacada escritora de la ciudad de Mar del Plata. Además de docente, publica periódicamente sus obras con gran aceptación. En diálogo con El Bonaerense, repasó cómo surgió su gusto por las letras: "Yo tengo 45 años y escribo desde que tengo 9, de toda la vida. Me he dedicado a escribir y se convirtió específicamente en una pasión desde la adolescencia, cuando tuve una excelente mentora y profesora llamada Marta Carlomagno de Jorge". Precisamente Marta tuvo una destacada carrera en Mar del Plata, como escritora y presidenta de la Asociación de Letras y Arte. "Me comenzó a guiar en mis primeros pasos en la poesía".

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Si bien su pasión por la literatura la llevó a escribir prosa y cuentos, con el correr de los años se dedicó de lleno a la poesía. "Cuando terminé la secundaria elegí la carrera de Letras, de alguna manera fue mi organizador de lecturas y es lo que me da día a día mi profesión. Traté de buscar lo más afín a mi vocación, era letras o filosofía", relata.

Al igual que lo vivió en sus inicios, Evangelina en su rol docente ha acompañado a muchos jóvenes en el arte de la escritura. "Tengo la gracia y la bendición de haber impulsado a mucha gente en la escritura. Hace poquito me escribió un ex alumno, Branco Troiano, que acaba de realizar dos novelas, durante los talleres a Carolina Favini. Fueron muchos alumnos y compañeros de literatura que tuve el privilegio de acompañar en sus primeros pasos", destaca con ogullo.

El largo proceso de la publicación

Como suele ocurrir con los artistas del Interior, dar a conocer el trabajo de uno es un proceso arduo y que implica muchos sacrificios. En el caso de Evangelina, logró publicar diversas obras literarias: Fuga (2009), Una casa no arde sola (2018), En la enorme presencia de lo nimio (2020) y Boccaccio para recitar (2022). "Es todo un tema, sacando Mercado Chino, que fue publicado en México, los demás los he pagado y autogestionado", explica. Y agrega que "nuestro trabajo de escritores es muy de hormiga y que no llega por lo pronto un rédito económico importante, pero sí la devolución de la lectura, el poder compartir con otros escritores, transmitir la palabra. La verdad que es un proceso muy difícil y un sacrificio para alguien que es docente".

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No obstante, su trabajo supo ser reconocido en varias ocasiones en el ambiente artístico: el "Luis Alberto Spinetta" en 2010 por la Facultad de Humanidades de la UNMDP, la "Faja de Honor" en 2018 por la Sociedad de Escritores de la Provincia de Buenos Aires y recientemente el "Lobo de Mar a la Literatura", entre otros. "Todos los llevo en el corazón y son un impulso hermoso, pero el que me dio en el alma y me llenó de alegría, por el contexto de pandemia y porque fue muy difícil en lo personal esa época fue el de la Fundación Argentina para la Poesía, el premio Alfonsina Storni que me otorgaron y me permitió poder publicar mi libro Enorme presencia en lo nimio. Realmente fue una alegría enorme", describe.

Un dato curioso del mundo de la publicación es la disparidad en los tiempos. Mientras que el proceso de revisión y de impresión dura algunos meses, la parte creativa puede llevar años. "Uno ve un libro de poesía chiquito, de 60-70 páginas y parece que es corto, pero hay por lo menos 2 años de preparación. La producción editorial es más ágil porque se cuenta con un equipo de profesionales del diseño y la edición", explica.

El legado continúa

Durante 2022, Evangelina vivió uno de sus momentos más felices como artista y como mamá. Es que su hija, Ana Violeta, publicó su primer libro de cuentos con solo 8 años. "Mi esposo también escribe, en casa hay como un clima constante de lectura y escritura, de gusto por lo artístico y claramente nuestros niños están inmersos en ese ambiente. Y tenemos esa suerte y bendición de que también sigan ese camino", detalla. Y agrega que, a pesar de conseguir un gran logro siendo tan joven, Ana Violeta realiza una vida completamente normal: "Ella lo vive como una virtud, sabe que tiene esa capacidad por ese hobby y ese gusto. Lo hace por medio de juegos, de lecturas, de descanso, de ver videitos de Youtube. Hace una vida absolutamente normal con este don que es poder transformar en historias las cosas que ve en su mundo como niña de 8 años", afirma.

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Con respecto al futuro, Evangelina quiere extender su arte por el mundo. "Me gustaría muchísimo publicar en otros ámbitos, llegar a Europa y expandir la cantidad de lectores". Además, desea que sus obras puedan publicarse en otros idiomas, tal como pasó con Mercado Chino. Por lo pronto, ya se encuentra activa en su próximo libro: "Aprendo mucho, siempre estoy capacitándome, uno nunca deja de aprender y también el año próximo quiero formar un buen equipo de taller de escritura aquí en la ciudad", finaliza.