Testimonio exclusivo del tío de Ezequiel Altamira: "Estamos rotos, alteraron el curso natural de las cosas"

Ezequiel Altamira fue un nombre que se hizo eco en la agenda pública argentina un fin de semana a finales de octubre en todos los medios de comunicación. El joven de 16 años fue asesinado a golpes por una patota en la madrugada del sábado 26 a la salida del boliche "Coolsite" en la localidad bonaerense de Ituzaingó, cuando junto a sus amigos, los persiguieron para robarle y le pegaron con patadas y manopla a tal punto de que terminaron con su vida.

El Bonaerense estuvo en comunicación exclusiva con Mario Eiroa, tío de la víctima, quien puso en contexto el escalofriante hecho. Cómo continúa la investigación, la inimputabilidad de los atacantes por su edad, como era su sobrino y el día a día de una familia que nunca más volverá a ser la misma.

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El chico de 16 fue asesinado a golpes por una patota.

A raíz de esto, Mario cuenta sus creencias del por que los jóvenes están mas violentos que nunca: "Si, lo están. Hace cuarenta años los pibes no tenían el acceso a la información que tienen ahora, si bien sabíamos que con catorce años no nos podían hacer nada, teníamos otra moral, teníamos otros códigos y nos comportábamos de otra manera. Hoy en día saben lo que pueden hacer y lo que no le pueden hacer, entonces salen sabiendo, salen más violentos, salen más vivos, y tenemos la la desgracia de haber caído en en una época donde los adultos responsables y los dirigentes del país le decían que si querés algo y no lo podes comprar, robalo".

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"Por eso es la batalla por la baja de la imputabilidad, que esto no viene ahora por por el hecho que nos pasó a nosotros, sino que es algo que venimos pensando hace tiempo que ya deberían haber bajado la la edad", el pedido es mas que claro, que los atacantes paguen por el conocimiento y conciencia que tenían al momento del asesinato. Una impotencia que se denota en las palabras de una familia que fue rota: "no tienen códigos, no tienen moral, y se sienten apoyados por muchos años de permiso".

Los seres queridos del joven de 16 años son los que más sufren su pérdida: "Estamos rotos, alteraron el curso natural de las cosas, Ezequiel debería haber despedido primero a sus abuelos, padres, tíos y nos dieron vuelta el reloj biológico. Lo que queda de nuestra vida, nos deja rotos".

Cámaras de seguridad de la zona grabaron a los asesinos volviendo a su casa luego de cometer el crimen.

Al ser consultado por la personalidad y forma de ser del menor, Mario cuenta: "Era un pibe sano, normal, él evitaba todo tipo de violencia física, tenía muchos amigos, muchas personas que lo querían, los padres de los amigos, tenía muy buena relación con sus primos, a él le gustaba mucho estar en familia".

La descripción del familiar de Ezequiel nos refleja la vida de cualquier adolescente promedio en Argentina: "no hay mucho más para decir, era bueno, sano, tenía ganas de nadar, tenía ganas de trabajar, ayudar a la madre, le encantaba estar con la hermanita, era un pibe bueno, normal".

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El próximo martes 26 de noviembre la familia se reunirá en una marcha con el pedido #JUSTICIAPOREZEQUIEL desde la Municipalidad de Ituzaingó hasta la plaza principal. Posteriormente, el 10 de diciembre se dirigirán al Congreso de la Nación con la intención de reclamar por la baja de la imputabilidad en nuestro país.

#JusticiaXEzequiel el mensaje que circula por las redes del Conurbano.

Las imágenes que se viralizaron el día del ataque:

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