03/07/2024
Dr. Nicolás González
MN 126909
IG: @drnigonza
El colesterol es una sustancia fundamental para nuestro organismo, para el buen funcionamiento, para la formación de hormonas, entre otros beneficios. Sin embargo, también hay que entender que hay algunos tipos de colesterol que son perjudiciales para la salud, principalmente por el daño que hacen sobre las arterias.
Arterias de cualquier parte del organismo, no solo del corazón, sino también de cerebro, riñón, piernas, aorta y demás. Para entender, hay dos tipos de colesterol: Existe un colesterol malo y también existe un colesterol bueno.
El colesterol malo favorece las lesiones de las arterias por el depósito en las paredes y posterior obstrucción. Por otra parte, el colesterol bueno ayuda justamente a lo contrario, que es a mantener las arterias sanas
Por este motivo, es que los cardiólogos evaluamos el colesterol total, que evalúa todos los tipos de colesteroles, pero también enseguida vamos a mirar el colesterol malo (LDL). Ese LDL, tiene que ver con el tipo de lípidos y va a ser el que favorece el daño de las arterias, mientras que el HDL es el llamado "colesterol bueno".
¿Qué provoca que una persona tenga colesterol alto?
Principalmente está marcado por el tipo de alimentación. Ciertos alimentos ricos en grasas saturadas y grasas trans puede ser que aumente el colesterol malo o LDL, pero no siempre va a ser el tipo de alimentación lo que aumente el colesterol, sino que hay otras variables que pueden favorecer al colesterol alto, como la obesidad o la falta de actividad física.
En este sentido, el sedentarismo es un claro predictor para aumentar el colesterol malo. A su vez, puede darse por una cuestión genética, ya que el mismo organismo genera colesterol y, en algunos casos, hay situaciones genéticas que favorecen la creación de un colesterol en exceso.
Esto puede provocar algo llamado "hipercolesterolemia familiar", que se da cuando hay valores muy elevados de colesterol a causa de entidades genéticas. En algunos casos, éstas entidades genéticas pueden ser las causantes del colesterol alto en lugar del sedentarismo, la falta de actividad física o la mala alimentación.
¿Cuáles son los valores normales de colesterol?
Se considera un valor normal de colesterol total cuando está por debajo de 200mg/dl. Por otro lado, para la población general se busca que los valores de LDL (colesterol malo) estén por debajo de 160 mg/dl, pero eso hay que individualizarlo en cada uno de los pacientes.
Por ejemplo, en un paciente sano, que no tiene factores de riesgo, un LDL de 140 mg/dl puede ser normal. Sin embargo, en una persona que tuvo un infarto o un ACV, se busca que los valores de LDL sean menores a 70 mg/dl y en lo posible menos de 55 mg/dl.
¿Se puede mantener el colesterol bajo?
Lo que los médicos recomendamos a los pacientes tiene que ver con todas estas variables que favorecen a que aumente el colesterol. Lo principal es sugerir un tipo de alimentación equilibrada, dónde seguro va a tener colesterol, pero tratando de evitar las grasas saturadas y las grasas trans.
La alimentación consiste en consumir mayormente alimentos ricos en fibras, frutas o verduras. Además, hay que evitar las carnes con grasas y tratar de reemplazarla por carnes magras. Por otro lado, realizar actividad física, evaluar el peso, no fumar y limitar el consumo de alcohol.
El consumo de alcohol (sobre todo en exceso) está directamente vinculado al aumento de los valores de colesterol.
¿Cuáles son las consecuencias a largo plazo?
A largo plazo, el colesterol alto puede dañar las arterias, por lo que al momento de ser diagnosticado con colesterol alto se debe establecer un tiempo de estrategia.
Ésta estrategia en un principio se debe llevar adelante con un tratamiento no farmacológico, es decir, un tratamiento con cambio de estilo de vida durante 1, 2 o hasta 6 meses según cada paciente. Recién tras este tiempo se podrá evaluar y, si no hay descenso de colesterol, se debe empezar con medicación.
Sin embargo, si se trata de pacientes con infartos o ACV, desde el día cero habrá que tratarlos con medicación. A nivel mundial, el mejor tratamiento farmacológico contra el colesterol son las estatinas.
Las estatinas son drogas muy utilizadas por mucho tiempo con muy poca tasa de efectos adversos. Muy pocas veces se pueden presentar dolores musculares, aunque no es algo muy común que suceda y no hay que dejar de utilizarla por tener miedo a este tipo de dolores.
Como se mencionó, a largo plazo se pueden dañar las arterias que no sólo se tratan de las arterias del corazón, sino que pueden ser también a nivel del cerebro, para favorecer un ACV o a nivel del riñón o las piernas.
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