Los herederos de Diego Maradona intentan frenar la subasta del Balón de Oro

Los herederos de Diego Maradona presentarán una demanda para evitar que se lleve a cabo la subasta del Balón de Oro que el astro ganó en 1986. El premio que Diego había ganado por ser el mejor jugador del Mundial de México, fue robado del banco de Napoles y la familia argumenta que quién lo tiene actualmente en su poder no puede subastarlo.

Gilles Moreau, parte del bufete Paradox Lawyers, es quién representa a Dalma y Gianinna Maradona, quienes impulsaron la demanda. El abogado anunció que no sólo intentarán frenar la subasta, sino que pedirán el secuestro judicial del trofeo y harán dos denuncias: una por robo y otra por encubrimiento.

A su vez, la denuncia está apoyada por los cinco hijos del 10: Dalma, Gianinna, Jana Maradona, Diego Fernando Maradona y Diego Maradona Jr. "Las dos hijas discutieron el asunto con los otros herederos, quienes dieron su aprobación a la acción legal", informó la agencia The Associated Press.

La realidad es que la ley francesa, dónde se subastará el trofeo, considera a Abdelhamid B., como dueño legítimo del trofeo, ya que él argumenta que lo adquirió lícitamente y no tenía idea de que era un balón robado. Además, explica que su legítimo dueño (en este caso, los familiares de Maradona) no lo reclamó en un plazo de 3 años desde que lo compró.

El caso del Balón de Oro

El trofeo que recibió el astro argentino fue robado del Banco de Napolés por miembros del clan italiano Giuseppe Misso. De hecho, se dice que el mismo Diego contactó a la mafia italiana para que lo regresaran, pero según el jefe Salvatore Lo Russo el trofeo ya había sido fundido en Oro para vender los lingotes.

Sin embargo, no fue la única versión, ya que también se dijo que un miembro de la mafia lo había perdido en una partida de póker. Casi 30 años más tarde, en enero de 2016, el Balón fue encontrado por Abdelhamid B., un franco-argentino coleccionista de arte.

Desde entonces, el hombre se dedicó a buscar si era el trofeo auténtico. Finalmente, el 2 de abril de este año la casa de subastas Aguttes de París verificó su autenticidad y decidió enviarse a subasta, desde la casa anunciaron que esperan recaudar cerca de 15 millones de euros.